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Informe Pyme
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ECONOMÍAS REGIONALES
mento para la producción frutí-
cola rionegrina y neuquina en
la úl t ima década y cuál fue el
peor?
J. F.:
Desde 2002, con la corrección
de un tipo de cambio que también
venía muy retrasado, y hasta 2008,
la actividad frutícola se desarrolló sin
mayores inconvenientes y con un ni-
vel de rentabilidad aceptable.
A partir de 2009, comienza a verifi-
carse este proceso de inflación eleva-
da que no es acompañada por el in-
cremento del tipo de cambio, gene-
Peras y manzanas
Î
La producción de manzanas y peras
está fuertemente concentrada en la región de
los valles norpatagónicos (provincias de Río
Negro y Neuquén), que representa aproxi-
madamente el 90 por ciento del total produ-
cido y tiene a Río Negro como la principal
provincia productora.
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En el mercado internacional, la posi-
ción de Argentina asume relevancia por su
carácter de contraestación en relación con
el hemisferio norte. En tal sentido,
compite con países como Chile y Sudáfrica.
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El mercado externo representa un destino importante de la producción: el empaque para la exportación de
fruta en fresco constituye el núcleo organizador de la cadena y de las demás actividades industriales y de
servicios que se desarrollan a su alrededor.
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El eslabón primario es mano de obra intensiva, requiere de un alto nivel de inversión (la producción se
inicia recién en el cuarto o quinto año desde la implantación en los montes con mejores tecnologías aplicadas)
y presenta una alta complejidad tecnológica productiva en términos de los niveles de calidad y sanidad exigidos
por el mercado internacional.
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La cosecha comienza en enero, con las primeras variedades de pera, y culmina en abril, con las
variedades tardías de manzana.
rando un retraso y un incremento de
los costos en dólares que afectó muy
seriamente la rentabilidad del sector
y, por lo tanto, mantener los merca-
dos internacionales que tanto esfuer-
zo costó conseguir.
C/IP:
¿Cómo imagina la real i-
dad del sector dentro de diez
años?
J. F.:
Consideramos que la fruticul-
tura de Río Negro y Neuquén tiene
mucho para darle a la región y al país.
Nuestras peras y manzanas son co-
nocidas y apreciadas en todo el mun-
do, logrando precios incluso superio-
res a los alcanzados por algunos de
nuestros competidores.
Entendemos que, de rectificarse es-
tos factores negativos y de poner-
se en marcha algún programa que
de sustentabilidad y previsibilidad,
esta actividad podría recuperar el
posicionamiento internacional de
otras épocas, además de mantener
abastecido el mercado interno con
frutas sanas y de excelente cali-
dad.